Y vos que no dudabas de nuestra eternidad.. 
Te pido corazón que vuelvas a mirar, porque a tu alrededor ya nada es igual..
Y caminar por el balcón ya no es una tentación. Decime la verdad, si total, no voy a saltar. Espero una respuesta a tanta confusión.
Cuando algo se quiebra y esos pedazos caen.. mis manos que te sueltan por miedo a fracasar. La vida me enseñó que no hay más de un adiós.
Y en cristal, mi vida, siempre te guardé. Hoy armo mi camino y a la cuenta de tres yo brindo por tu amor, que estúpida razón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario